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Re: "de la princesa que se extravió", de Rabi Najman de Breslev - shiur 1 - con rav Ariel Don y daniEl I. Ginerman de David Maloof - Monday, 20 de July de 2009, 22:06 | |
Shalom Rav Daniel y Rav Ariel, Shalom Javerim. Con el permiso de ustedes trataré de dar las ideas de lo poco que logre captar en las palabras hermosas de este sipur. Este sipur para mi es bastante interesante en la medida que es un reflejo del proceso espiritual que el hombre vive y que la humanidad vive. El rey, sus 6 hijos y La hija amada, el Rey, el virrey, el ayudante del virrey, el palacio, los guardias, el rey del palacio, la princesa como reina de ese palacio, las aparentes bondades del palacio, las pruebas por las que tiene que pasar el virrey, etc, todo...todo deja una gran enseñanza y tratare de plasmar solo un poco de las cosas que logre discernir según lo que he aprendido. El Rey, Hashem, sus 6 hijos, las 6 cualidades del corazón, y su hija amada, la Shejina que será exiliada en el palacio (la creación) donde esas cualidades deben ser manifestadas. Pero el Rey se "enfurece", o mas bien aparenta estar enojado con su hija porque ella desea ganarse ese amor que el Rey le da y decide cambiar las reglas de juego. El Rey declara que lo no bueno venga y se la lleve. Lo no bueno son todas esas experiencias que El Rey crea para su amada, para que ella aprenda a valorar ese amor sagrado que El siente hacia ella. Y así ella empieza a recorrer un camino que aunque realmente no deseaba, es necesario que lo recorra para que al final el amor que recibe tenga un sentido diferente y así pueda realmente valorar los amores de su padre el Rey. Luego que la doncella se pierde, aparece el virrey, un valeroso caballero que se ofrece a buscar a la princesa después de los esfuerzos que el rey ha hecho para encontrarla. Y el cuento dice claro que el virrey la busco y la encontró antes de contarnos todas las travesias que el tuvo que pasar para lograr su objetivo, y esto nos enseña que Siempre el hay esperanza, porque antes que la enfermedad esta la cura, antes de la oscuridad exitia la luz infinita. Dice el relato que el virrey camino por el desierto mucho tiempo, es decir que por mucho tiempo estuvo perdido en las muchas artimañas y engaños de la materialidad, pero que un dia vio un camino ( una luz, la Torah), y no había nada que perder, ¿porque no caminar por allí? Luego de vagar en el desierto tanto tiempo ¿porque no arriesgarse? Así lo hizo, camino y camino, y encontró una fortificación con guardias con un gran aspecto, y aunque tuvo miedo decidió entrar. Al momento de hacerlo nadie se lo impidió, entro como si fuera su casa, y luego de entrar se encontró con un gran palacio, un rey, ostentosas edificaciones, lujos, todas cosas que aparentaban una gran comodidad. Esta descripción es muy parecida a las aparentes bondades que el mundo que nos rodea nos ofrece, comodidad, facilidad, grandes lujos, y lo mejor es que es muy fácil dejarse llevar por ellas. La materialidad que nos ofrece este mundo es un gancho en el cual es fácil guindarse, es fácil dejarse llevar por la aparente seguridad que nos ofrece una vida inclinada hacia lo material. Pero el virrey solo era un espectador en ese sitio, nadie detecto su entrada y nadie percibió que el andaba por ahí merodiando. De pronto el ray de ese palacio mando a llamar a la reina, con gran ruido (Ra'as gadol=613=conjunto de mitzvot de la Torah) . Y una reina que viene de un palacio dominado por las manos del Rey de Reyes, El Santo Bendito Sea, no se puede manifestar a menos que esté antecedida por las mitzvot de la Torah. Y en el momento en que ella aparece se acerca al virrey a preguntarle si la reconocía, como queriendo saber si de verdad estaba atento a su misión y no se había desviado ante la ostentosidad del lugar. Y el la reconoció, e inmediatamente se pusieron al día, ella quería ser rescatada, y el quería rescatarla, pero había condiciones. Como ella desea ganarse los amores del rey y no recibirlos con vergüenza tenía ahora que sufrir las consecuencias y compartir misión con aquel que se había dispuesto a ayudar hasta las últimas circunstancias. Ella le dice que debe irse a un lugar lejano y no salir de allí. Que debía estar allí durante un año y que debía desear con todo su corazón y con toda su alma rescatarla de ese mundo de ilusiones vagas. Y que debía ayunar intensamente y abstenerse de dormir para que no perdiera segundos valiosos en su dedicación. Y así lo hizo el valiente virrey, durante todo el año hizo tal cual como ella le pidió, y al final del año, en el ultimo día, el sale del lugar donde estaba y se tropieza con un árbol de frondosas manzanas, y no logra soportar el deseo de comer, y come y cae dormido. Luego recibe una segunda oportunidad, per esta vez más sencillo, solo se le prohíbe que en el último día no puede tomar vino, ni dormir. Y lo hace, pero en ese ultimo día camino hacia el palacio para rescatar a la doncella se topa con un manantial de aparente vino, y la curiosidad lo vence, se acerca y toma de el pensando que no es posible que exista un lugar de ese tipo, pero si era vino y nuevamente pierde la oportunidad. Esto me recuerda lo que dos veces por día pronunciamos en la Tefilah, en la recitación de la Shema, "No desviarnos en pos de nuestros corazones ni en pos de nuestros ojos". El virrey primero lo nomino su deseo, su sentimiento, su necesidad y se desvió en pos de su corazón y perdió su primera oportunidad. Luego el virrey ve un manantial de vino, y el no podría creer lo que sus ojos veían, por tanto decidió ir y demostrar que no era posible que eso existiera, pero la curiosidad le quito de las manos la segunda oportunidad que tuvo para rescatar a la reina, de poder sacarla del exilio. Estas situaciones son muy comunes en nuestras vidas, la necesidad en algunos momentos nos hace olvidarnos del verdadero objetivo por el cual vinimos a este mundo y desviamos nuestros sentimientos ante situaciones que seguramente nos apartaran del temor y amos a Hashem. Y muchas veces la curiosidad y nuestra supuesta seguridad no hace errar, pensando que somos lo suficientemente fuertes y valerosos como para que una situación difícil nos venza y al final nos vence y perdemos oportunidades inmensas que hubiéramos podido aprovechar si no hubiéramos confiado exclusivamente en nuestras propias ideas o creencias. Sin embargo, después de haber perdido estas oportunidades el sigue firme en el cumplimiento de su objetivo, pero ahora las instrucciones son distintas. La doncella le dice donde esta, y el tiene que encontrarla. El virrey seguro de la guía que la doncella le da, emprende un viaje y en este se encuentra con tres gigantes, uno el encargado de los animales, el otro el encargado de las aves, y el último encargado de los vientos. Los tres intentan persuadirlo de que el lugar que el busca no existe y cada uno lo hace a su nivel. El primero insiste fuertemente que ese lugar no existe y lo dice que le han dicho tonterías, el segundo en su nivel, también trata de desviarlo pero con menos intensidad, y el último es menos insistente y en este es donde se sabe que la información que la doncella a dejado es correcta. Aprendemos de aquí que después que reconocemos que hemos fallado y que sabemos que nuestra búsqueda de Hashem va a ser un poco mas difícil porque debemos asumir las consecuencias de nuestros actos, y también hemos logrado arribar a un nivel de conciencia un poco superior y que estamos convencidos de nuestra misión, servir a Hashem, aparecen siempre gigantes que intentaran demostrarnos que la montaña de oro con una fortificación de piedras preciosas en su sima no existe aunque ellos saben que si existe. La materialidad, las falsas doctrinas y al final las desviaciones de la verdad, nos intentaran demostrar que no existe ese lugar al que pretendemos. Pero ahí esta el merito, caminar fuertes, vigorosos y seguros de nuestra meta y seguros de las instrucciones, la Torah, que hemos recibido, sin vacilaciones, y nunca dejándonos comprar por argumentos baratos. La verdad no tiene precio, y esta es una Sola, y ella es Hashem. Y al final la doncella es rescatada, pero no se nos cuenta como porque todavía no ha sucedido, que sea pronto y en nuestros días. Amen. Nosotros vivimos en un palacio (la creación) que nos ofrece muchas cosas que son vanas y en el hay una Doncella (La Shejinah) que no pertenece a este mundo, pero que esta atrapada en el por la voluntad y bondad del Rey (el Creador), para que sus otros 6 hijos (las cualidades del corazón) puedan ser descubiertos y manifestados por medio de un virrey (el hombre – "mashiaj") que es enviado al palacio para hacer retornar a la doncella y tiene que pasar por medio de pruebas que la misma doncella le pone al virrey (porque ella conoce el camino) para al final lograr que con el retorno de la ella, los amores del Rey sean recibidos con dignidad y honor. Me excuso ante todos si he cometido algún error y le pido a Hashem que me lleve por el sendero de la verdad. Saludos a todos, con amor, David Maloof |
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