KOLISRAEL.TV: Re: Herzl y el Sionismo - Un Documento imprescindible producido pr Shofar.Net
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Shalóm  Después de ver el vídeo, una no sabe muy bien si decir algo, si decir más o no decir nada. Es tierno, es hermoso, cruel y terrible. Mientras lo veía, me entraban ganas de decir cosas, pero continuaba viéndolo, y me decía: "Luego escribo". Y, al rato, me desdecía: "No, mejor no escribo nada". Así que arranco del final para decir que, después de ver todo lo terrible, las ideas increíblemente suicidas de los primeros sionistas, después de tratar de entenderlos, incluso, y de sentir lástima y rabia por esa íntima vergüenza que el judío ha sentido tantas veces por el hecho de ser judío y que ha sido el comienzo, tantas veces también, de las persecuciones por parte de los demás (de los que no eran judíos), después de todo eso, digo, arrancando del final. Si en cualquier otro país del mundo (y, por supuesto, en España, donde vivo) se me planteara la cuestión de separar lo civil de lo religioso, no sólo lo defendería de inmediato, sino que me daría una rabia terrible que un no creyente tenga que estar sufragando con sus gastos religiones e inventos de la ignorancia y de la necesidad del alma a partes iguales, como este cristianismo que se nos mete como frío en los huesos..., o el budismo, me da igual. Es más, llevo tiempo peleando contra eso: contra la barbaridad de que tengamos que subvencionar a la jerarquía eclesiástica personas que rabiamos por escapar de su influencia. Eso, en cualquier otro país del mundo, digo. No sólo entendería, sino que exigiría, como parte de esa (cualquier) nación, que se desvincularan mis deberes y derechos civiles de los antojos de la religión de turno. Ahora, si lo mismo me lo dicen sobre Israel, y me lo dijera, además, un judío, temo que no terminaría de dar crédito. Y basta contemplar esas imágenes de niños aprendiendo Torá y Talmud en las escuelas, de hombres y de mujeres balanceando sus cuerpos, los primeros, cubriendo sus ojos, las segundas, y... pareciera que todo está dicho. Las escisiones del judaísmo, si no yerro, son relativamente recientes y "modernas", todas ellas. Pocos siglos atrás, para los abuelos de los abuelos de los abuelos... de cualquier judío, no existía más que un judaísmo. Y de ningún modo era, ni siquiera así, algo monolítico, porque siempre el judaísmo privilegió el debate, la discusión. No hay más que acordarse de las memorables disquisiciones de Hillel y Shamai. (En otras religiones, cuando creen haber superado algo, anulan lo anterior, y, así, restan validez también a su pasado y lo convierten -es más fácil- en fábula, en mito; por el contrario, el judío jamás violentó ni tachó una letra de la Torá..., pero escribió volúmenes y volúmenes de comentarios, de comentarios de comentarios, de reflexión.) Lo que quiero decir es que en modo alguno es comparable el judaísmo con ninguna de las religiones que conocemos, con ninguna religión en absoluto. Es que parece que cuesta entender que el judaísmo no es ni siquiera lo que en occidente se ha dado en llamar "religión". Sólo sucede que, dentro del universo inagotable del judaísmo, hay algo, un fundamento, que a lo que más se parece es a eso que afuera, en las culturas paganas, han llamado religión. Pero no es nada de eso en absoluto. Los niños que, en las escuelas o en el seder, están aprendiendo Talmud o están estudiando Torá, no están aprendiendo, en modo alguno, un listado de leyes sin sentido, de deberes, un dogma, la obediencia a una autoridad religiosa que ostenta privilegio y ejerce tiranía (como la iglesia a a que estamos habituados), ni están aprendiendo dioses con forma, figura, nombre y casi hasta apellidos, dioses dibujables, moldeables en mármol o bronce, que es imposible creerse,que es más sano ignorar. Nada que ver. Cuando se enseña eso que erróneamente (a mi juicio) toman por religión (los gentiles pero, sorprendentemente, también muchos judíos), cuando se enseña eso, no se está enseñando esa porción de estupidez humana que se infiere de todas las religiones en absoluto. El judaísmo tiene un referente obvio y un fundamento indiscutible y necesario en la noción de D's, pero, más allá de ello, después de todo ello y necesariamente a partir de ello, es discusión y es debate, es filosofía, es investigación, es ciencia. Hacia el final del vídeo, alguien hace referencia a esos niños que aprenden Talmud y Torá, y dice algo así como que son niños que parecieran sabios. No existe tal concepto de sabiduría vinculado a las creencias paganas, en el mundo occidental. No sé si me alcanzo a explicar. Creo que no es realmente esto lo que quería decir (o no todo lo que pretendía decir). Pero desearía que, si alguien ha tenido la paciencia de leer hasta aquí, hubiera entendido algo de cuanto quería decir y no alcanzo a expresar. Y creo que toda la confusión que el vídeo delata se desbarataría con sólo poner a estudiar a esas personas (judíos, obvio; porque a los no judíos nada les diría) de sus padres y sus abuelos hacia atrás. ¿Qué es el judaísmo, si no? ¿Qué pretendían esos sionistas en avanzadilla, si no? ¿Una tierra judía sin judíos? Hay ideales que son válidos y loables... para las naciones. Yo creo que el compromiso del judío, consigo y con su origen, es otro. Si se avergüenza de ser lo que no puede dejar de ser, está cediendo a la locura. También recordé, viendo el vídeo, algo que creo que nunca conté. Algo que comentaba a un amigo, pocos años atrás. A propósito de qué podía llevarme a desear ser judía, yo tenía varias guindas sabrosas entre mis manos (entre ellas, el anonadamiento con que escuché por primera vez músicas hebreas), pero nada de todo eso hermoso importaba tanto como esta íntima certeza: como dije a ese amigo, "siento que todo lo que deseo es compartir el destino del pueblo judío". Entonces, ¿cómo un judío va a ser... ¡antisemita!? Bue, ya así, buenas noches y mis brajót. (Disculpad lo largo |
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